Andaba ocioso “El topillo” y en la mañana de ayer le dio por darse un garbeo por las Cortes, donde comparecía en comisión el nuevo presidente del Consejo de Cuentas, el reciclado Mario Amilivia, el veterano político leonés que ha saltado desde Zamora, donde presidía el Consejo Consultivo, a Palencia, sede del organismo encargado de fiscalizar la gestión económica y financiera de la Administración autonómica y local de Castilla y León. Y al dirigirse a la sala donde se celebraba la comparecencia observó inusitado movimiento en el pasillo de la planta noble, donde se ubica el desmedido despacho presidencial (José Manuel “Toti” Fernández Santiago lo hacía casi todo a lo grande) y los departamentos más estrechamente vinculados a la Mesa de la Cámara.

El trajín guardaba relación con los nombramientos de personal de confianza de la Presidencia publicados ayer mismo por el Boletín Oficial de las Cortes, a saber, la nueva Jefa de Gabinete y su adjunta, los nuevos Jefes de Prensa y Protocolo y un asesor “polifacético” para lo que sea menester. Todo lo cual causó sorpresa a “El topillo”, toda vez que no estaba previsto que el presidente en funciones, Ramiro Ruíz Medrano, abordara dichos nombramientos. Todo lo contrario: Ruiz Medrano había pedido al personal de confianza nombrado en su día por Silvia Clemente que se mantuviera en sus puestos hasta la llegada del nuevo presidente, el burgalés Ángel Ibáñez, quien será elegido en la sesión plenaria prevista el próximo martes.

“Bacaladas” marca Ramiro.- Pero por razones que ellos sabrán lo cierto es que ambos acordaron adelantar los nombramientos, de forma que los que permanecían a la espera del relevo vieron publicados sus ceses en el Boletín de las Cortes del pasado miércoles. Con ello el atildado Ibáñez se ha ahorrado el trago de tener que cesar a dicho personal, a cambio de lo cual Ruiz Medrano, que es de los que las mata callando, le ha colocado como el que no quiere la cosa un par de “bacaladas” de superior categoría.

Nada de particular tiene la repesca como Jefe de Protocolo de Vicente Díez Llamas, quién regresa a la misma función que ya desempeñó durante la presidencia del antes mencionado Fernández Santiago. Más sorprendente ha sido el nombramiento de la nueva Jefa de Prensa, Blanca Jiménez Cuadrillero, periodista ajena a la información política que hasta ayer prestaba sus servicios en una agencia de comunicación y una revista de gastronomía, enología y turismo que tienen como administrador y apoderado a Máximo Gómez Domínguez, alcalde de El Carpio y miembro del comité ejecutivo provincial del PP de Valladolid.

Pedigrí acreditado.- A ese mismo comité ejecutivo pertenecen el citado Díez Llamas y el nuevo asesor de la Presidencia, Carlos Paramio Conde, quien en su perfil de Linkedin se autodefine como “deportista, inquieto y polifacético”. Paramio es el responsable de Redes Sociales dentro de la vicesecretaria provincial del PP de la que es titular el periodista David Frontela, a la sazón uno de los tres asesores de libre designación adscritos a la vicepresidencia primera de las Cortes, cargo que ocupa el propio Ruiz Medrano. Al nuevo asesor no se le puede negar pedigrí dentro del PP, ya que fue uno de los vástagos de altos cargos de la Junta o del partido -en su caso de la Junta- agraciados en 2006 con una de las viviendas de protección oficial adjudicadas a dedo por el ayuntamiento de Valladolid en la urbanización Villa del Prado (rebautizada para la ocasión como “Villa Gaviota”), ubicada precisamente justo al lado de la sede de las Cortes.

Tampoco puede pasar inadvertida la designación de la nueva Jefa del Gabinete de la Presidencia, Jenninfer Zamorano, cuya contratación y desempeño como Jefa de Protocolo del ayuntamiento de Burgos han resultado bastante controvertidos en la capital burgalesa, dando lugar a determinadas habladurías que se sintió obligado a desmentir el alcalde, Javier Lacalle. En realidad, el nombramiento de Jenny ZG, que ese es su nombre artístico, ha sido el único de verdadera confianza de Ibáñez, ya que la directora adjunta de dicho Gabinete tiene inequívoco marchamo mañuequista.

Se trata de la ex concejala del ayuntamiento salmantino y ex alcaldesa de Palacios Rubios, Isabel Hernández Rozas, quien en 1999 ocupó durante seis meses el escaño del Congreso de los Diputados que entonces dejó vacante el actual presidente de la Diputación y del PP de Salamanca, Javier Iglesias. Lo grande del caso es que a finales de junio todos los nombrados pueden salir por donde entraron ayer si, como resulta muy previsible, la presidencia de las Cortes recae sobre partido distinto al PP.

El Topillo de Castilla y León