¿Cómo quedarían compuestas las Cortes de Castilla y León si las del pasado domingo hubieran sido elecciones autonómicas? Calculadora en mano, “El topillo” se ha tomado la molestia de extrapolar los resultados y ya les adelanta que la única mayoría parlamentaria suficiente para sustentar al gobierno de la comunidad saldría de un pacto entre el Partido Popular y Vox.

El PP, fuerza más votada el pasado domingo, ganaría dos nuevos escaños (uno en Burgos y otro en Segovia) respecto a las elecciones autonómicas de mayo, pasando a contar con 29 de los 31 procuradores del total de 81 que conforman el hemiciclo de Villa del Prado. Por el contrario, el PSOE descendería hasta los 29, seis menos de los que dispone en la presente Legislatura, perdiendo un escaño en Valladolid, León, Burgos, Salamanca, Segovia y Soria.

Ciudadanos, que cuenta con 12, sufriría el correspondiente correctivo, conservando únicamente un escaño en las cuatro provincias más pobladas (Valladolid, León, Burgos y Salamanca), con lo que ni siquiera contaría con grupo parlamentario propio. Se vería obligado a compartir el mixto con Unidas Podemos, que, al mantener sus actuales escaños por Burgos y León y sumar uno nuevo por Valladolid, pasaría a tener tres procuradores.

La presencia de Vox, que en mayo obtuvo un solitario escaño, se dispararía nada menos que hasta un total de 14. Conseguiría representación en las nueve provincias (3 procuradores por Valladolid, dos por Salamanca, León y Ávila y uno por cada una de las cinco restantes).

Habida cuenta de que la mayoría absoluta de las Cortes se sitúa en 41 procuradores (justamente los que suman ahora los 29 del grupo popular y los 12 de Ciudadanos), la única combinación aritmética posible para lograrla en ese virtual hemiciclo vendría dada por la suma de los 31 escaños del PP y los 14 de Vox, que totalizarían 45. Ni pensar quiere “El topillo” en el hipotético gobierno que alumbraría esa hipotética coalición…

El Topillo de Castilla y León