El lunes y el martes nos esperan temperaturas mínimas de 6º bajo cero. Las calles que el domingo no estén despejadas se convertirán en pistas de hielo. No está demás que hagan una llamada a los alcaldes y concejales de sus localidades para que actúen y hagan algo. No han sido votados para hacer rutas de tapas o ir con el bastón de mando detrás de la procesión. Ni para dar premios y laureles a poetas o pintores de medio pelo.

Los ediles, aunque estén colocados en listas electorales por jefecillos de partido, están para servir a los vecinos. Para las tapas, los concursos, las procesiones o comprar una acuarela o una pintura al óleo, está la sociedad civil. Los ayuntamientos están para otra cosa, además de para subir tasas e impuestos.

Desde la jornada del sábado, numerosas poblaciones tienen sus calles intransitables. Es obligación de los vecinos despejar de nieve las aceras de sus puertas o portales, pero es obligación de los consistorios facilitar la movilidad de peatones y vehículos para que el lunes puedan ir a trabajar los que tienen la suerte de poder hacerlo. No estamos en Siberia y no se necesita mucha destreza para hacerlo posible.

Eviten los desplazamientos por carretera salvo que sea absolutamente imprescindible. Sean buenos vecinos y limpien sus aceras. Sean malos ciudadanos y pidan a sus ediles que se pongan manos a la obra y que hagan su trabajo. Avisados estaban. Y ya no tenemos a un Torrente Ballester o a un Paco Umbral para que les hagan una crónica y, por otra parte, Imanol Uribe ya no está para muchos trotes.