En relación con el artículo “Usuarios de los autobuses del AVE denuncian deficiencias en el servicio” publicado en El Adelantado de Segovia en la que se vierten una serie de acusaciones respecto al servicio prestado el lunes tarde e incluso en contra de los propios conductores, queremos desde el Comité de Empresa Urbanos de Segovia manifestar nuestro malestar por dichas acusaciones.

En primer lugar, las averías generadas durante el servicio son avisadas “in situ” por los conductores que en ese momento prestan el servicio, continuando con él servicio si es preciso, hasta que proceden a la sustitución de autobús o reparación del mismo.

En segundo lugar, los conductores están para sacar el servicio adelante, en la medida de sus posibilidades, no para poner impedimentos para que los usuarios no lleguen a sus destinos.

En tercer lugar, los conductores son muy conscientes de las condiciones en las que se trabaja, gracias a eso y a su profesionalidad sacan los servicios adelante, ya que dada la situación actual de los autobuses no deberían de salir a circular más de la mitad de la flota. Recordemos que el nuevo pliego lleva un retraso que se acerca a los dos años.

En cuarto lugar, los conductores se rigen por una hoja de ruta en la que tienen que seguir un horario (en ocasiones con horarios muy justos a la ruta que se realiza), llegando y saliendo de las cabeceras a la hora que marca dicha hoja; si en este caso de las líneas 11 y 12, el tren es el que se retrasa nosotros no tenemos culpa de ello y la queja o reclamación deberá de ir hacia renfe o Adyf y no en contra de nosotros, que sí cumplimos nuestro horario. Además, y al contrario que los trenes, los autobuses no son los únicos usuarios de la vía, por lo que deben respetar la preferencia de paso de vehículos y peatones, lo que inevitablemente causa retrasos.

En quinto lugar, los conductores empezamos a estar ya cansados de que nos digan que tenemos un mal trato hacia los usuarios, somos conscientes de que hacemos un servicio de cara al público pero también somos conscientes de que tiene que existir reciprocidad por parte del usuario y que el trato del usuario al conductor es pésimo e incluso nulo tratándonos como una parte inmóvil del autobús.

Debido a todo lo expuesto pedimos una rectificación del artículo anteriormente mencionado y que realmente se carguen responsabilidades contra los responsables del servicio, la empresa concesionaria o propio Ayuntamiento, que no pone las medidas necesarias ante las situaciones vividas en estos dos últimos años.