Al vicepresidente Francisco Igea, líder destacado del campeonato regional de pisada de charcos, le ha salido un serio competidor en esta modalidad política. Y no es otro que su compañero de partido Luis Fuentes, nada menos que el presidente de las Cortes y máximo responsable orgánico -eso sí, designado a dedo- de Ciudadanos en Castilla y León.

No satisfecho con anunciar su propósito de cargarse la Fundación Villalar, Fuentes se ha venido arriba tras el éxito de crítica y público obtenido en León y, en un salto cualitativo, se ha lanzado a cuestionar la efemérides del 23 de abril como fiesta oficial de la comunidad autónoma. Con manifiesto desprecio hacia una celebración fijada en el Estatuto de Autonomía (art. 6), Fuentes ha deslegitimado la fiesta oficial, avalando eso de que para muchos el 23 de abril es “San Ikea”.

Ni José María Aznar, que, cuando presidió la Junta dio la espalda a la concentración de Villalar, llegó tan lejos como lo ha hecho ahora tan frívolamente el actual presidente de las Cortes. De hecho, Aznar en ningún momento se planteó trasladar de fecha la fiesta oficial de la comunidad.

El primero en responder a Fuentes ha sido precisamente el propio Igea, que ha señalado que “la Junta no se plantea abrir un debate que está cerrado y normalizado”. Al vicepresidente, cuyas relaciones con Fuentes son bastante mejorables -Igea era partidario de situar a Ana Carlota Amigo en la presidencia de la Junta- se le notado un gran esfuerzo de contención para no desautorizar como le apetecería a su compañero de partido. “Abrir un debate que no es necesario no es lo más correcto”, ha dicho, al tiempo que ha recordado que no hay ningún documento de Ciudadanos que cuestione la fiesta del 23 de abril.

Lo que no ha dicho Igea es que el programa de Ciudadanos tampoco hace referencia a la eliminación de la Fundación Villalar, propuesta en la que sí que está de acuerdo con Fuentes. El asunto de la fiesta oficial no tiene más recorrido, ya que el PP no está dispuesto a meterse en ese jardín y se ha pronunciado en los mismos términos que lo hizo respecto al recurrente asunto de la capitalidad: “El debate no está abierto ni se va a abrir”.

A la ocurrencia (de la que nunca más se supo) de ocupar el apartamento de la sede parlamentaria, Fuentes ha añadido ahora la irresponsabilidad que supone deslegítimar desde la presidencia de las Cortes la fiesta oficial de la comunidad. En otra cosa no, pero en el campeonato regional de pisada de charcos Ciudadanos está que se sale.

El Topillo de Castilla y León