La familia Alcántara retoma la crónica social de España casi en el mismo punto, abril de 1985, en el que dijeron adiós en la pasada tanda. Y lo hacen en unos nuevos capítulos en los que la familia Alcántara buscará oxígeno en sitios muy diferentes: Carlos, en Bruselas; Inés recuperando su faceta como actriz; Herminia cumpliendo su amenaza de irse a una residencia… y Antonio y Mercedes, fascinados por la moda de los chalets adosados.

En los nuevos capítulos, los Alcántara van a buscar oxígeno en sitios muy distintos: Carlos, en Bruselas, lavando platos en un restaurante español; Inés, cimentando su carrera como actriz y abriéndose a una relación totalmente distinta a la anterior; Herminia, cumpliendo su amenaza de irse a una residencia; María, demostrando su capacidad para el patinaje sobre hielo; Miguel y Paquita, construyendo su nuevo nido en el emergente Benidorm de mediados de los 80…

Y Antonio y Mercedes, fascinados por la moda de los adosados, intentarán una nueva mudanza, esta vez en los Altos de San Genaro, en un barrio de jóvenes profesionales. Siempre atento a las oportunidades, Antonio no desaprovechará la ocasión de conocer a Felipe González y de asistir como testigo de la Firma del Tratado de Adhesión a Europa. La apertura de España al mundo, y hechos como el reconocimiento diplomático de Israel en enero de 1986 marcarán también la vida de los Alcántara, que tendrán que adaptarse a las nuevas realidades de una España que se abre al mundo y da un portazo definitivo al franquismo.