Comentábamos hace algunos días las dificultades del PP para encontrar un candidato con garantías a la Alcaldía de Valladolíd. El problema se extiende a las otras dos capitales con alcalde socialista, Segovia y Soria, donde los populares están obligados a renovar su cartel electoral, habida cuenta del parco resultado y el bajo perfil de los candidatos presentados en 2015, Raquel Fernández y Adolfo Sainz, respectivamente. Harina de otro costal es el ayuntamiento de Zamora, donde la anterior candidata, la senadora Clara San Damián, tiene las manos libres para decidir si intenta tomarse la revancha frente a Francisco Guarido, el único alcalde de IU en una capital de provincia española.

Tampoco van a repetir todos los alcaldes, cinco, con que cuenta el PP en capitales de Castilla y León. Obligado es el cambio de cartel en Salamanca, que se podría adelantar al resto si Alfonso Fernandez Mañueco renuncia a la Alcaldía cuando sea proclamado oficialmente candidato del PP a la presidencia de la Junta. El primer teniente de alcalde, Carlos Carbayo, se perfila como el sucesor de Mañueco en el ayuntamiento salmantino.

También se barrunta cambio en el consistorio burgalés, donde Javier Lacalle, alcalde desde 2011, quiere dar por cerrada su etapa municipal y encabezar la candidatura a las elecciones autonómicas. Lacalle pretende endosar la candidatura a la Alcaldía a su antiguo vicealcalde, Ángel Ibañez, actual procurador y uno de los portavoces adjuntos del grupo popular en las Cortes. Se trataría de una especie de permuta que seguramente le hará poco gracia a Ibañez, quien no tendría más remedio que aceptar el trueque, toda vez que el actual alcalde de Burgos es el secretario de Organización del PP de Castilla y León y por ende uno de los hombres fuertes de la Ejecutiva que encabeza Fernández Mañueco.

En Ávila, en principio se supone que tendría que repetir el actual alcalde, Juan Luis Rivas, pero la presencia en su equipo de gobierno de Héctor Palencia convierte a este último en una posible alternativa,al tratarse del secretario de Política Munícipal de esa misma Ejecutiva de Mañueco.

Así las cosas, hoy por hoy los dos únicos alcaldes del PP que casi con toda seguridad optarán a la reelección son el palentino Alfonso Polanco y el leonés Antonio Silván. Tras anunciar en su día que no volvería a ser candidato, Polanco ha reculado y ahora está dispuesto a presentarse a un tercer mandato. Y Silván no tiene otra opción que aferrarse a la Alcaldía a la espera de que la futura sucesión de Mariano Rajoy le sea propicia y abra para él otros horizontes políticas.

El topillo de Castilla y León