Dosificación de la incultura
A la manera orwelliana, el régimen partidocrático en España, posee un Ministerio de Cultura que se ocupa, metódicamente, de destruir nuestros principios y valores culturales
Atanasio Noriega
Una de las arrogancias de la oficialidad, que resulta del consenso político que degenera el idioma, es la expresión “tener acceso a la cultura”.
Como resultado de la progresiva estatalización de la sociedad, del aumento y concentración del poder del Estado creado por Franco, y desarrollado por quienes lo heredan y controlan sus instituciones, se ha llegado a tratar de implantar la idea absurda de que la cultura, convertida en mito, es algo elevado y distante a lo que el Estado, a través de un poder pretendidamente omnimodo, podría acercarnos.
De este modo, la sociedad civil española, mendicante y genuflexa, ignorante de la realidad política que la somete y que no entiende, llega a implorar, en su cadalso de suplicantes supliciados, lo que ella misma produce: la cultura. Los usos y costumbres, el modo de vida colectivo, se convierte así en producto de consumo que se administra y comercializa en dosis, a una servidumbre desmoralizada.
Llegará el momento en el que pidan al Estado que llueva, que florezcan los almendros o que germinen sus cosechas. Tal es el grado de ignorancia que fomenta esta nauseabunda partidocracia en manos de mediocres y de traidores.
¡Y ahora corran!, corran todos a votar….
Segovia al día no se hace responsable de las opiniones de nuestros colaboradores.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.115