El silencio de los corderos (o todo sea por mantener la Junta)
Estaba claro que el PP no podía demorar mucho más tiempo su respuesta a las exigencias de Ciudadanos, ya que corría el riesgo de que el partido naranja emprendiera la negociación alternativa con el PSOE que sigue esperando el socialista Luis Tudanca. De modo y manera que a mediodía de ayer salió apresuradamente a la palestra Alfonso Fernández Mañueco para dejar claro que acepta todo cuanto se le exija para alcanzar el pacto que le aupe a la presidencia de la Junta. Era y es de cajón. En la línea de “lo que ellos quieran” manifestado en torno a los aforamientos, Mañueco acepta el veto a los alcaldes y presidentes de Diputación que lleven más de 8 años. Eso y todo cuanto se le antoje a Ciudadanos.
La única “objeción” planteada por el presidente autonómico del PP sería la de excluir de dicho veto a aquellos candidatos a repetir en el cargo cuya reelección no depende de Ciudadanos. En realidad se trata únicamente de dos presidentes de Diputación, el salmantino Javier Iglesias y el vallisoletano Jesús Julio Carnero. El primero cuenta con mayoría absoluta y al segundo le basta el apoyo del único diputado provincial de Vox para ser reelegido (siempre, claro está, que termine por ser finalmente el candidato, cosa que sigue estando por ver).
En realidad, Fernández Mañueco está obligado a sacar la cara por Iglesias, el presidente a la sazón del PP salmantino y su gran apoyo en la provincia desde hace lustros. Pero si Igea se empeña en incluirlo en el paquete, el susodicho será sacrificado sin mayor problema. Al fin y al cabo, si Mañueco se erige en presidente de la Junta podrá recompensar con altos cargos en el gobierno de la comunidad a todas los damnificados por ese veto. De ahí el silencio corderil de los damnificados, ninguno de los cuales corre peligro de quedarse en el paro político.
Insólito: Dimite por un mal resultado electoral.- En contraste con el caso de Iglesias, que lleva 24 años ocupando cargos políticos y frecuentemente por duplicado, ayer asistimos en el mismo Salamanca a un hecho ciertamente insólito: El que ha sido candidato a la alcaldía por Ganemos, Gabriel Risco, anunció su renuncia al acta de concejal a causa de los malos resultados electorales obtenidos por la candidatura, que solo ha conseguido mantener dos de las cuatro concejalías con las que contaba en la ciudad helmántica. Que “El topillo” sepa, junto al candidato de IU a la presidencia de la Junta, José Sarrión, es el único político de esta comunidad que ha dimitido considerándose responsable de un revés electoral.
Y no será que no ha habido descalabros electorales de todos los colores el pasado 26-M. Pero nadie se ha dado por aludido. Ya se recordó aquí los catastróficos resultados de los alcaldables socialistas en Zamora y Medina del Campo, para más inri ambos secretarios provinciales del PSOE. O el ridículo infligido al PP abulense por el partido fundado por el ex presidente de la Diputación, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, fiasco del que nadie se ha responsabilizado.
Es verdad que el secretario autonómico de Podemos, Pablo Fernández, anunció que pondría su cargo a disposición del Consejo Ciudadano del partido en Castilla y León. Pero mientras se sustancia dicha “puesta a disposición”, Fernández ha reforzado su posición el Consejo Ciudadano estatal, en el que ha pasado a hacerse cargo de un área sobre Ámbito rural y España vaciada. Vamos, que intención de abandonar el aparato, no parece que tenga mucha…
El Topillo de Castilla y León
Segovia al día no se hace responsable de las opiniones de nuestros colaboradores.
Normas de participación
Esta es la opinión de los lectores, no la de este medio.
Nos reservamos el derecho a eliminar los comentarios inapropiados.
La participación implica que ha leído y acepta las Normas de Participación y Política de Privacidad
Normas de Participación
Política de privacidad
Por seguridad guardamos tu IP
216.73.216.160