El miércoles por la mañana, en el paso de peatones entre el bar Atenas y la farmacia de San Millán, un coche atropelló a un perro. Y fue incapaz de parar.
El perro tiene dueños, y aunque somos conscientes de que la culpa no es del coche, qué menos de que después de atropellar a gran velocidad a un perro por un paso de peatones, y si atropelles o das un golpe a algo, alguien, animal o persona... que pares .
Los dueños están desamparados. Muchas gracias a la persona que conducía ese coche por no parar, por no preguntar. El dueño estaba dos metros delate del perro.
Restaurante horno de asar
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